Cómo hacer una reverencia - genuflexión (con vídeo e infografía)
La reverencia es una forma de saludo que aún se utiliza delante de reyes y emperadores, aunque no todo el mundo sabe cómo hacerla de forma correcta
Reverencia: el saludo que no todo el mundo sabe hacer
Las recepciones ofrecidas por los reyes suelen ser uno de los actos más habituales en los que podemos observar el gesto de saludar "doblando ligeramente la rodilla". Es un gesto que solo hacen las mujeres ante los miembros de la realeza.
Actualmente, también es posible observar algunos saludos "clásicos" -como el de dar la mano, e incluso dar dos besos- de personas que optan por no realizar este tipo de reverencia o genuflexión.
Este saludo origina muchas controversias por lo que algunos consideran que es una muestra de sumisión, aunque otras personas lo consideran como un simple gesto de cortesía, de respeto.
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El gesto no debe ser exagerado, doblando excesivamente las rodillas. A diferencia de los hombres, al saludar y al doblar las rodillas no se debe mirar al suelo sino al frente, a la cara de la persona a la que se saluda.
Cómo se hace este saludo - reverencia de forma correcta
Se adelanta ligeramente la pierna derecha y la pierna izquierda es la que se dobla de una forma algo más pronunciada que la pierna derecha.
Según rezan las reglas de protocolo más clásicas, que actualmente apenas son seguidas por una minoría, la genuflexión se puede hacer con la pierna derecha o con la izquierda según esta regla:
1. La pierna izquierda se dobla o flexiona para saludar a las personas.
2. La pierna derecha se flexiona para saludar a Dios.
Más vale una imagen que mil palabras. En el siguiente vídeo podemos observar cómo se hace este tipo de saludo.
Ver más vídeos sobre protocolo, etiqueta y buenas maneras.
Infografía, cómo hacer una reverencia: hombre y mujer
La reverencia es un gesto de cortesía que se hace con la parte superior del cuerpo como señal de respeto o admiración. Consiste en una leve inclinación hacia adelante del tronco y la cabeza. Las mujeres, no tienen la necesidad de llegar con la rodilla al suelo, como se puede ver en algunos casos. Deben hacer un gesto mucho más leve, poco pronunciado. Es mucho más apropiado y elegante.
La reverencia, como le ocurre al besamanos, es un gesto cada vez menos utilizado en las recepciones y en otros actos.
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